Eurovisión 2024 ha arrancado este martes la competición oficial con una apertura explosiva para su primera semifinal que ha tenido entre sus protagonistas a una explosiva Chanel en su retorno al festival así como un pañuelo palestino en plena ofensiva de Israel en Gaza.

Lo ha portado en una de sus manos el artista sueco Eric Saade, tercero en 2011 en este concurso con 'Popular' y, desde entonces, una figura precisamente muy conocida en su país y lo ha hecho pese a la prohibición expresa de que se accediera al recinto del Malmö Arena con banderas palestinas.

Eurovisión vive una de sus ediciones más convulsas a cuenta de la participación de Israel, que participará en la segunda semifinal a pesar de las múltiples peticiones de su expulsión del festival, tal y como se hizo con Rusia en 2022 tras invadir Ucrania.

Dos años después de "romper caderas y corazones" y conseguir la mejor clasificación para España desde 1995, Chanel ha regresado a Eurovisión como invitada ilustre para inaugurar la competición oficial de su hexagésimo octava edición con una actuación explosiva.

"¡Llegó la mami!", ha vuelto a exclamar este martes la cubanoespañola al desfilar con paso firme sobre el escenario del Malmö Arena, de azul eléctrico y rodeada de doce bailarines junto a los que ha reinterpretado su icónico 'Slomo' con una nueva coreografía de vértigo.

Al lado de la tercera clasificada en 2022 y de Eric Saade también ha actuado otra reina emblemática de la historia reciente del festival: Eleni Foureira, segunda por Chipre en 2018 con 'Fuego'.

Irlanda, favorita

En su encarnación demoníaca la otrora católica Irlanda se ha convertido en la gran revelación de la primera semifinal de Eurovisión 2024, disputada este martes en el Malmö Arena, y postulará su candidatura a la victoria junto al gran favorito de esta edición, Croacia.

Junto a ellos han conseguido el pase a la final del próximo sábado los representantes de Ucrania, Lituania, Finlandia, Serbia, Portugal, Eslovenia, Chipre y Luxemburgo, en su retorno después de 30 años de ausencia. Por contra, se han quedado fuera de la competición musical Polonia, Islandia, Moldavia, Australia y Azerbaiyán.

Quince han sido los participantes que han luchado por su clasificación, con el pop radioformulable de 'Liar' de Silia Kapsis por Chipre, el sentido 'Ramonda' de la serbia Teya Dora y la electrónica sensual del lituano Silvester Belt como primeras cartas de esta semifinal.

Sonoros aplausos ha generado a continuación la invocación romántico-demoníaca de la irlandesa Bambie Thug con 'Doomsday Blue', un tema de "ouija pop" con un incendiario final rematado con el mensaje quizás premonitorio de 'Corona a la bruja'.

Otra invocación muy intensa, aunque desde una perspectiva catártica y etérea, ha sido la de las ucranianas Alyona Alyona & Jerry Heil. Con 'Teresa & Marie' han ensalzado el poder femenino ante los infortunios de la vida, en la tercera participación de este país en Eurovisión pese a los estragos de la invasión rusa.

Muy poco después ha llegado el turno del gran favorito de las casas de apuestas, el croata Baby Lasagna con 'Rim Tim Tagi Dim', una tema que bebe del rock de Rammstein, del pop punk y de la electrónica industrial, todo con un imaginario visual completamente folclórico.

En coordenadas muy diferentes se han hecho valer asimismo la elegancia en blanco de la portuguesa Iolanda ('Grita'), la intensidad tribal de la eslovena Raiven ('Veronika') y el humor irreverente y absurdo de los finlandeses Windows95man ('No Rules!').

Frente al peso de esas propuestas han quedado relegadas la islandesa Hera Björk ('Scared of Heights'), la polaca Luna ('Tower'), la moldava Natalia Barby ('In The Middle'), el azerí Fahree (ÖzünlÉT Apar) y los australianos Electric Fields, que han traído a este foro una lengua aborigen de las antípodas ('One Milkali').

Todos los participantes en semifinales

Por primera vez desde que se instauró el sistema de semifinales, tanto el anfitrión como los países del llamado "Big Five" han obtenido permiso para actuar en vivo en estas emisiones sin comprometer su presencia asegurada en la final.

En la de este martes ha podido así disfrutarse de las ganas de Reino Unido por volver a la cabecera de la tabla de la mano de una gran estrella del pop global como Olly Alexander y su elaborada puesta en escena para 'Dizzy', así como de los hermanos Marcus & Martinus por Suecia y del alemán Isaak con 'Always On The Run'.

La segunda semifinal, prevista para este próximo jueves, pondrá en juego otras ocho plazas para la final pero con un contendiente más: Malta, Albania, Grecia, Suiza, Chequia, Austria, Dinamarca, Armenia, Letonia, San Marino, Georgia, Bélgica, Estonia, Noruega, Países Bajos e Israel.