Al margen de la merecida derrota que el Athletic sufrió en el Metropolitano en un duelo clave en la lucha por la cuarta plaza de la clasificación, la resaca del encuentro ante el Atlético de Madrid se ha centrado en los cánticos racistas que Nico Williams sufrió desde la grada del estadio colchonero. Un episodio desagradable, que muy poco tiene que ver con el deporte, y que LaLiga va a denunciar este lunes ante el Fiscal Delegado de delitos de Odio de Madrid. "He ido a sacar el córner y he escuchado sonidos de mono”, explicó el menor de los Williams al término del encuentro. Unos gritos vertidos por un sujeto que la Policía Nacional parece haber identificado ya.

La entidad colchonera está a la espera de conocer la identidad de la persona que presuntamente realizó los cánticos racistas. En el caso de ser socio o abonado del club, lo suspenderá cautelar e indefinidamente de tal condición hasta la resolución judicial. Pero al margen de las medidas que adopte el Atlético, la realidad es que en los últimos tiempos siguen aflorando comportamientos racistas en las gradas de los campos de fútbol (desde la máxima categoría pasando por las competiciones menores). El propio Iñaki Williams, que ya sufrió en el campo del Espanyol y en el del Sporting de Gijón hace unos años unos comentarios parecidos, alertó del tema en la zona mixta del Metropolitano, después del mal rato que pasó su hermano. “No es la primera vez que pasan este tipo de cosas. Tenemos que construir entre todos, no solo un fútbol bueno, sino un mundo bueno en el que no su pueden tolerar este tipo de acciones. Mi hermano lo ha escuchado claro, se ha dirigido hacia el línea, que también lo ha escuchado, el árbitro ha reaccionado muy bien, dando por megafonía el aviso. Esta lacra tiene que acabar, que dos no empañen lo que estamos construyendo. Esto es fútbol, aquí se viene a disfrutar y no a intentar empañarlo. La gente tiene que entender que no es fácil tener que aguantar este tipo de insultos”, destacó el mayor de los Williams, que cuestionó la respuesta posterior del público del Atlético: “No he entendido por qué la gente le recriminaba, estos pitos tendrían que ser para la gente que ha cometido estos insultos y no para la víctima”.

En el acta que redactó al término del encuentro Juan Martínez Munuera, el colegiado alicantino detalló que los insultos a Nico fueron escuchados por el juez de línea principal, el que se ubica en la zona de los banquillos y que en el momento en el que el jugador del Athletic se disponía a lanzar el córner estaba junto a él.“En el minuto 36 del partido aproximadamente, cuando el juego se debía reanudar con saque de esquina a favor del Athletic Club, se escuchó desde la grada fondo sur un sonido imitando a un mono “UH UH”, siendo escuchado por el Árbitro Asistente nº1 al mismo tiempo que el dorsal nº11 del Athletic Club, Nicholas Williams. En ese preciso instante se activó el protocolo contra el racismo, indicando al Delegado del Atlético de Madrid que el partido no sería reanudado hasta que se comunicara por megafonía que dichas actitudes debían cesar y que en caso de repetirse, deberíamos parar nuevamente pera esta vez entrando todos a vestuarios. 1 minuto después se anunció por megafonía, reanudándose el encuentro de nuevo”.

Apoyo de Koke

En las filas colchoneras, su capitán mandó un mensaje de apoyo al extremo del Athletic. “Si ha pasado algo con Nico, mandarle mucho ánimo, mucha fuerza, porque en nuestra sociedad y en el fútbol gente así no tiene cabida. El Atlético de Madrid, tanto los jugadores como los aficionados, están a favor de Nico y en contra de esas situaciones que no deben pasar. Mucho ánimo y fuerza. No tiene que pasar eso en un campo de fútbol”, destacó Koke Resurrección al término del encuentro.