La intención es que esté ya en Euskadi mañana para salvarle la vida. Un gran operativo, complicado y muy delicado, traerá hasta el hospital de Cruces a Alexander García, el ciudadano vasco que se encuentra en estado crítico en Bangkok. La ola de solidaridad que ha levantado el caso está siendo extraordinaria. Hasta el punto de que el Ministerio de Defensa se ha puesto las pilas y un avión militar no transportará esta vez armamentos sino un equipo sanitario de once personas para cuidar al joven en su repatriación. Otro equipo de Osakidetza lo llevará a Cruces. 10.000 kilómetros lo separan de casa. Suerte.